Sueño infantil: despertares nocturnos y madrugadas
Es completamente normal sentirte abrumada si tu pequeño de un año se despierta varias veces durante la noche y madruga a las 4 o 6 de la mañana. Los despertares nocturnos y las madrugadas tempranas son preocupaciones frecuentes entre padres y madres, y comprender las posibles causas y soluciones puede marcar una gran diferencia en tu bienestar y en el de tu hijo. En este artículo, exploraremos algunas razones por las que tu bebé podría estar despertándose y te daremos algunos consejos basados en evidencia para ayudarte a mejorar su sueño.
¿Por qué mi hijo se despierta varias veces por la noche y tan temprano?
Como señalan varios artículos sobre el sueño infantil (Referencias 1, 2, 3, 4), existen diversas razones para los despertares nocturnos y las madrugadas tempranas en niños pequeños. A esta edad, la maduración del sueño aún está en proceso (Referencia 4), lo que significa que pueden experimentar interrupciones en su ciclo de sueño.
En niños de 1 año, los despertares pueden deberse a diversas causas:
- Molestias físicas: La dentición, una enfermedad o incluso un simple malestar pueden ser suficientes para interrumpir el sueño de tu pequeño (Referencia 1).
- Ansiedad por separación: Es normal que un niño de un año sienta ansiedad por la separación de sus padres, lo que puede manifestarse con despertares nocturnos (Referencia 2).
- Sueños y pesadillas: A medida que el niño crece, empieza a soñar y puede experimentar pesadillas, lo que le lleva a despertarse asustado o inquieto (Referencia 1).
- Necesidad de regulación: Es importante recordar que los bebés, especialmente a los 12 meses, podrían tener todavía necesidades de regulación, especialmente en la noche. Su ritmo circadiano (el reloj interno que regula el sueño y la vigilia) todavía se está desarrollando.
- Rutinas de sueño poco consistentes: La falta de una rutina establecida a la hora de acostarse puede contribuir a los despertares nocturnos (Referencia 3).
- Regresiones del sueño: Como menciona la referencia 4, las regresiones del sueño son normales y forman parte de la maduración del sueño. Estos períodos de interrupción del sueño pueden ocurrir de forma repentina y a veces sin razón aparente.
¿Qué puedo hacer para ayudar a mi hijo a dormir mejor?
Entendemos lo agotador que puede ser lidiar con los constantes despertares nocturnos. Es importante recordar que eres una buena madre/padre, y que estás haciendo lo mejor que puedes. Aquí tienes algunos consejos que podrían ayudar:
- Establecer una rutina de sueño consistente: Un ritual relajante antes de dormir, como un baño, un cuento y una canción de cuna, ayuda a tu hijo a prepararse para dormir (Referencia 3).
- Crear un ambiente propicio para el sueño: Asegúrate de que la habitación esté oscura, silenciosa y a una temperatura agradable (Referencia 1). Cerrar las cortinas y persianas por la mañana para evitar que la luz solar lo despierte, como indica la Referencia 1, es crucial.
- Respuesta consistente a los despertares: Si tu hijo se despierta, responde de forma breve y tranquila, sin encender luces ni jugar. Recuerda que responder constantemente a cada despertar puede reforzar el comportamiento (Referencia 2).
- Analiza las tomas nocturnas: Si tu bebé se despierta para comer, evalúa si las tomas nocturnas son realmente necesarias (Referencia 3).
- Identifica posibles molestias: Si sospechas que tu hijo tiene alguna molestia física, consulta a tu pediatra (Referencia 1).
- Paciencia y constancia: Recuerda que llevar a cabo cambios en las rutinas de sueño lleva tiempo y paciencia (Referencia 2, 4).
Si te sientes perdida o abrumada, es normal buscar apoyo. A veces, es necesario analizar la situación con un profesional.
¡Recuerda que no estás sola! En Vía Láctea sabemos lo importante que es el descanso para ti y para tu bebé. Te animamos a realizar una valoración gratuita en vialacteasuenoylactancia.com para recibir apoyo personalizado y orientación experta.
Recuerda...
Los despertares nocturnos y las madrugadas tempranas en niños de un año son comunes y, en la mayoría de los casos, temporales. Establecer rutinas consistentes, crear un ambiente adecuado para el sueño y responder con calma a los despertares nocturnos son claves para ayudar a tu hijo a dormir mejor. Recuerda que la paciencia y la constancia son fundamentales. Si necesitas ayuda adicional, no dudes en realizar una valoración gratuita en vialacteasuenoylactancia.com para recibir apoyo personalizado y orientación experta.